1/8/09

4- Arrepentimiento Legal VS Evangélico.

4- Arrepentimiento Legal VS Evangélico.

Luego de enunciar su definición trinitaria de la fe [III-2-VII] Calvino pasa a discutir acerca del arrepentimiento y la gracia. Calvino hace una distinción entre “arrepentimiento legal” y “arrepentimiento evangélico” [III-3]


Arrepentimiento legal, es el enfoque en el cual se dice “Arrepiéntete y SI te arrepientes serás perdonado” Como si Dios tuviera que ser persuadido a proveer su gracia. Esto mantiene al imperativo de la obediencia por encima del indicativo de la gracia, y reserva el amor, la aceptación y el perdón de Dios como condicionados a lo que hagamos, sujetos a nuestros méritos de arrepentimiento.

Gracia Evangélica.
Calvino señala que ésta proposición invierte el orden evangélico de la gracia, y presenta al evangelio como antecedente al perdón, mientras que en el Nuevo Testamento, el perdón es lógicamente antecedente al arrepentimiento. La declaración evangelística del Nuevo Testamento es “Cristo clavó tus pecados en la cruz, así que arrepiéntete”.
Lo que esto quiere decir es que el arrepentimiento es nuestra respuesta a la gracia, no una condición para la gracia. Las buenas noticias del evangelio son que hay perdón para con Dios y que Dios ha declarado sus palabras de perdón en Cristo, y esas palabras nos llaman a una respuesta de fe [el arrepentimiento].

La respuesta Perfecta
Implícita en nuestra aceptación de la palabra de amor de Dios, de parte nuestra, se encuentra una humilde sumisión al veredicto de nuestra culpabilidad. Pero ¿Quién puede dar una respuesta perfecta, un acto perfecto de penitencia, una perfecta sumisión al veredicto de Dios? Lo que nosotros no podemos hacer, Dios lo ha hecho por nosotros en cristo.


La vida Vicaria de Dios por nosotros.
Calvino entiende que la venida de Jesucristo no es sólo la venida de Dios como Dios, sino también la venida de Dios como hombre para realizar vicariamente por nosotros lo que no podríamos haber hecho adecuadamente por nosotros mismos. Cristo lidia con los humanos de parte de Dios y lidia con Dios de parte de los humanos. En Cristo, encontramos tanto a Dios dándose a sí mismo a nosotros en perdón incondicional, y al mismo tiempo vemos a Jesús, como cabeza representante de la humanidad, absorbiendo en sí mismo el justo juicio de la ira de Dios en lugar nuestro.
Dios no solamente declara la palabra de perdón y luego se sienta a esperar nuestra respuesta de arrepentimiento.
Dios conoce nuestra débil condición, Gracia significa que en Jesucristo encontramos personalmente a Dios, presente como un regalo, dado para nosotros y nuestro perdón; y al mismo tiempo vemos a Jesús respondiendo vicariamente por nosotros hacia Dios. a la luz de esto, estamos llamados a vivir en FE, pero nuestra respuesta ahora es por la gracia de Dios, a través del Espíritu Santo; en los méritos de Jesús.

IRC = Institución de la Religión Cristiana
Traducido y editado por Pbro. Samuel Hdz. Clemente de “Calvin on Faith Series” Parte 4- de
Justin Holcomb en www.theresurgence.com

3- La obra del Espíritu Santo

3- La obra del Espíritu Santo
Calvino define la fe NO en términos de un simple libro con el visto bueno del Espíritu Santo.
Calvino presenta las cosas así: La fe tiene como su enfoque único a Jesús y es activada por la obra de Iluminación del Espíritu Santo. La Iluminación juega un papel indispensable en la doctrina de la fe de Calvino, especialmente al considerar la condición humana:

Esta sencilla declaración que tenemos en la Palabra de Dios, debería bastar para engendrar en nosotros la fe, de no impedirlo nuestra ceguera y obstinación. Mas como nuestro entendimiento está inclinado a la vanidad, no puede llegar jamás a la verdad de Dios; y como es romo y corto de vista, no puede ver la claridad de Dios; por eso la Palabra sola, sin la iluminación del Espíritu Santo, no nos sirve ni aprovecha de nada.
IRC – III-2-XXXIII



Calvino presenta la Iluminación del Espíritu y la seguridad interna obrada por el Espíritu, ambas en conexión con la fe:
“Hay dos operaciones del Espíritu en la Fe, tal como la fe consiste en dos partes principales; en ambas, el Espíritu ilumina y confirma la mente… el comienzo de la fe es el conocimiento, y el fin de ello es una firme y sana persuasión que no admite más dudas en oposición, ambas partes, como ya lo he dicho son la obra del Espíritu” [Comentario sobre Efesios]


Un fundamento Trinitario de la fe.
Después de referirse a Cristo y su evangelio, a la promesa de Gracia de Dios Padre y a la Iluminación del Espíritu Santo, Calvino llega a su definición final de Fe:

Por tanto, podemos obtener una definición perfecta de la fe, si decimos que es un conocimiento firme y cierto de la voluntad de Dios respecto a nosotros, fundado sobre la verdad de la promesa gratuita hecha en Jesucristo, revelada a nuestro entendimiento y sellada en nuestro corazón por el Espíritu Santo.
IRC – III-2-VII


La definición de Calvino es concisa, y el contenido del conocimiento de la fe es claro. La certeza de la Fe no descansa en un argumento o proposición, sino en la obra de la Divina Trinidad; el fundamento de la Fe es DIOS.


IRC = Institución de la Religión Cristiana
Traducido y editado por Pbro. Samuel Hdz. Clemente de “Calvin on Faith Series” Parte 3- de
Justin Holcomb en www.theresurgence.com

28/7/09

Todo lo demás necesita reformarse

Dios nunca cambia;
todo lo demás debe reformarse.


El nunca cambia: pero todas las demás cosas deben reorientarse a su propósito cada día.
La iglesia es la primera en recibir ésta indicación:
La Iglesia Cristiana siempre debe reformarse;
Siempre debe orientarse hacia el propósito de Dios.

Efesios 5:25b-27
Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.
Hablamos entonces de la necesidad de reformarnos como iglesia cada día.
Hablamos de La reforma de nuestra religión; nuestra religión debe apuntar hacia nuestra santificación, hacia nuestra purificación. Debemos orientarnos cada día la tarea de presentarnos ante el Señor como una iglesia que no tiene mancha ni arruga sino que le agrada a él.


Porque Dios nunca cambia; pero todo lo demás debe reformarse.

Su fuerza no cambia.
Su poder nos transforma

Piensa en su fuerza: la fuerza de Dios no cambia.

Romanos 1:20
Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo…


Su poder es eterno; siempre permanece, nunca cambia.
Su energía nunca se acaba; pero la tuya y la mía lo hacen cada día más.
A las 5 de la mañana no estás tan despierto y aleta como a las 2 de la tarde.
Y cuando tengas 80 años no correrás tan rápido como a los 20…
Aún los más fuertes de entre nosotros tienen que descansar.

Ana Gabriela Guevara debe aprovechar sus años; porque dentro de 20 años no tendrá esa velocidad.
“Ronaldiño” debe aprovechar su época de oro; porque a los 45 no tendrá esa habilidad ni esa puntería.
Es que las cosas cambian; pregúntale a Nadia Comanechy, pregúntale a Maradona; pregúntale a cualquier adulto y te dirá; ya no es lo mismo, las cosas han cambiado…

Pero el poder de Dios no cambia; el no se cansa ni necesita dormir; nunca dirá “hoy no me siento bien” porque el poder de Dios nunca cambia.





Daniel 6:26b
…Porque él es el Dios viviente y permanece por todos los siglos, y su reino no será jamás destruido, y su dominio perdurará hasta el fin.


Salmo 59:16-17
Pero yo cantaré de tu poder, Y alabaré de mañana tu misericordia;
Porque has sido mi amparo Y refugio en el día de mi angustia.
Fortaleza mía, a ti cantaré; Porque eres, oh Dios, mi refugio, el Dios de mi misericordia.


Piensa en esto; Dios nunca hace una pausa para ir a comer; ni le pide a sus ángeles que lo cubran mientras piensa cómo responder a nuestras oraciones; el nunca le da carpetazo a nuestros asuntos; sino que tiene el control de todas las cosas por su divino poder.

¿Necesitas una mano fuerte para agarrarte?
Dios nunca cambia; el siempre es fuerte y su fuerza nos transforma.

¿Necesitas una verdad que nunca cambie?
Prueba con la de Dios; su verdad nunca se quiebra; nunca es engañadora… La verdad de Dios nuca cambia, puedes confiar en ella.

Su verdad no cambia.
Su palabra nos guía

La verdad que el mundo anuncia cambia cada día; no se puede confiar en nadie ¿o si? sí en la verdad de Dios que nuca cambia; yo puedo cambiar de parecer, ustedes pueden cambiar de gustos pero Dios nunca cambia; el siempre llama bueno a los bueno y malo a lo malo.

Isaías 40:8
Sé seca la hierba, se marchita la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre


Y ya que su verdad nos guía; sus caminos no cambian nunca.
Dios siempre odiará el pecado y amará al pecador.
El siempre humilla a los orgullosos; y consuela a los afligidos.
Nunca cambia de dirección a mitad del camino; nunca nos juega bromitas, nunca repara su ley porque su ley es perfecta…
Nadie más lo será.


Su amor no cambia.
Su gracia nos sostiene

Hebreos 13:8
Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos.


Su fuerza, su verdad, sus caminos y su amor nunca cambian.
Todo lo demás debe reformarse; tu vida, mi vida; nuestra iglesia… todo lo demás debe reformarse.
Pero Dios permanece siempre fiel. Por eso nosotros nos transformamos por su poder; nos guiamos por su palabra y nos gozamos en su gracia.

Salmo 33:11 DHH
…los proyectos del Señor permanecen firmes para siempre.


Eso somos tu y yo; eso es la iglesia; un proyecto en manos de Dios.
Dios no cambia; todo lo demás debe cambiar.
Una vida en manos de Dios siempre se reforma de acuerdo a su propósito.





  • ¿Qué cambios estás experimentando?


  • ¿Puedes enfrentar los cambios de la vida aferrándote al Dios que nunca cambia?


  • ¿Quieres deja que Dios reforme tu vida cada día de acuerdo a su propósito?


Algunas ideas de éste artículo fueron extraídas de "Su mano inmutable",
Cap.6 de "No se trata de mí" por Max Lucado.

2- La promesa de Gracia.

La promesa de Gracia.


Cristo como el Objeto de la FE.
De acuerdo a Calvino, el contenido del conocimiento de la FE es muy específico y reducido, no amplio y vago:

Porque en la inteligencia de la fe, no se trata solamente de que sepamos que hay un solo Dios, sino, y más aún, que comprendamos cuál es su voluntad respecto a nosotros. Porque no solamente hemos de saber qué es Él en sí mismo. Sino también cómo quiere ser para con nosotros. Tenemos, pues, ya que la fe es un conocimiento de la voluntad de Dios para con nosotros tomado de su Palabra.
IRC – III-2-VI


Ésta disposición de parte de Dios hacia nosotros está ligada a las promesas de gracia que Calvino y nosotros encontramos en la Biblia; aunque la Escritura no es exactamente el objeto de la fe. Para Calvino, la Escritura es la autoridad formal de la revelación especial de Dios, pero sólo Cristo es el centro de la fe salvadora y el objeto del conocimiento de la fe.


El fundamento de la FE
Calvino excluye elementos de la Escritura de su definición del objeto de la fe:

Mas como el corazón del hombre no es confirmado en la fe por cualquier palabra de Dios, hemos de investigar aún qué es lo que la fe considera propiamente en la Palabra… Con todo esto no negamos que el oficio de la fe sea dar crédito a la verdad de Dios siempre que hable, diga lo que diga. Lo que buscamos al presente es qué encuentra la fe en la Palabra de Dios, para apoyarse en ella.
IRC – III-2-VIII



Mientras la fe reposa en la Palabra de Dios, tiene la promesa de la misericordia de Dios como su enfoque principal.

Ponemos como fundamento de la fe la promesa gratuita de Dios, porque en ella se apoya propiamente la fe…
…[La FE] siempre comienza en la promesa; en ella se para, y allí acaba. Pues busca en Dios la vida que no se encuentra en los mandamientos, ni en las amenazas, sino únicamente en la promesa de la misericordia, y promesa gratuita; porque las promesas condicionales, en cuanto que nos remiten a nuestras obras, no prometen más vida que la que podemos encontrar en nosotros mismos.
Por eso san Pablo atribuye al Evangelio de modo particular el título de "palabra de fe" (Rorn.10:8); título que no concede ni a los mandamientos, ni a las promesas de la Ley. Y la razón es que no hay nada que pueda fundamentar la fe, sino esta [generosa] embajada
de la benignidad de Dios por la cual reconcilia al mundo consigo (2 Cor.5:18-20).
IRC – III-2-XXIX


La Grata Promesa de Misericordia.
Calvino hace una distinción importante, salvaguardando la revelación especial el explicar su postura:

Al decir, pues, que la fe ha de apoyarse en la promesa gratuita, no negamos que los fieles admitan y reverencien por completo la Palabra de Dios; únicamente señalamos como fin propio, al que la fe ha de tender siempre, la promesa de la misericordia. Los fieles han de reconocer también a Dios por Juez y castigador de los malhechores; sin embargo han de poner sus ojos especialmente en su clemencia; puesto que les es presentado como benigno y misericordioso, tardo a la ira e inclinado a hacer bien, suave y dulce para todos, y que derrama su misericordia sobre todas sus obras
IRC – III-2-XXIX


Los términos que Calvino usa para denotar la Promesa se encuentran a lo largo de toda la Institución:
Misericordia y Gracia - II-17-I
Favor Gratuito – III-21-VII y II-16-XI
Bondad y Gracia- II-7-IV
Amor Gratuito – III-21-V y II-17-I

Aunque la FE y la Escritura son 2 cosas separadas, son INSEPARABLES.
Calvino distingue entre la Escritura completa, que debe ser creída plenamente y acreditada por el Espíritu Santo, y la promesa de misericordia en Cristo, la sustancia de la escritura y el sólo objeto de la fe pero no debemos elegir uno en vez de otro sino afirmar y atesorar ambos. Calvino advierte acerca de nunca separar la FE de la ESCRITURA.


Sin la Palabra no hay fe. En primer lugar hemos de advertir que hay una perpetua correspondencia entre la fe y la Palabra o doctrina; y que no se puede separar de ella, como no se pueden separar los rayos del sol que los produce…
…si la fe se aparta por poco que sea de este blanco al que debe tender, pierde su naturaleza, y en vez de fe, se reduce a una confusa credulidad, a un error vacilante del entendimiento. Esta misma Palabra es el fundamento y la base en que se asienta la fe; si se aparta de ella, se destruye a sí misma. Quitemos, pues, la Palabra, y nos quedaremos al momento sin fe.

IRC – III-2-VI


En su comentario sobre Romanos, Calvino escribe:
“Ésta conexión entre la Fe y la Palabra debe ser bien entendida y cuidadosamente sostenida, ya que la FE no puede proveernos nada que ella no reciba de la Palabra”

IRC = Institución de la Religión Cristiana
Traducido y editado por Pbro. Samuel Hdz. Clemente de “Calvin on Faith Series”
Parte 2- de Justin Holcomb en www.theresurgence.com

1- Cristo y su evangelio

Cristo y su evangelio

La Fe Cristiana: No es lo que crees que es.
¿Qué significa fe? Durante muchos siglos, se le asoció con conocimiento específico o un conjunto de creencias, pero recientemente el entendimiento de la “fe” ha cambiado. En nuestra cultura actual, fe primordialmente se refiere al acto de creer, no a lo que se cree (el objeto de esa “fe”). Y cuando se menciona el objeto de la “fe” rara vez se especifica con claridad, puede ser el amor, la esperanza, el destino, lo desconocido, uno mismo, alguien más, o algunas veces Dios.
Si ponemos atención, ya no escuchamos descripciones de FE como CONOCIMIENTO BÍBLICO, o confianza en la PERSONA Y OBRA DE JESÚS, sino que lo actual es hablar de fe como un sentimiento religioso general, o sentimentalismo subjetivo a nivel personal.

Definamos FE.
Un entendimiento cristiano de la FE es muy diferente, y Juan Calvino encuentra especialmente necesario definir la fe.

Por tanto, podemos obtener una definición perfecta de la fe, si decimos que es un conocimiento firme y cierto de la voluntad de Dios respecto a nosotros, fundado sobre la verdad de la promesa gratuita hecha en Jesucristo, revelada a nuestro entendimiento y sellada en nuestro corazón por el Espíritu Santo.
IRC – III-2-VII



El Objeto de la FE.
De acuerdo a Calvino, el Objeto del conocimiento de la fe es Jesucristo. Él define la fe como las ondas expansivas de una serie de círculos concéntricos: La existencia de Dios, el Poder de Dios, La Fidelidad de Dios, La Voluntad Divina revelada a nosotros en la Biblia, y finalmente [El punto de origen] Jesús. Todos estos círculos están incluidos dentro de la FE, pero sólo el epicentro es propiamente identificado como el objeto de la FE.

…al poner a Dios simplemente como objeto de fe, extravían las conciencias con su vana especulación, en vez de dirigirlas al fin verdadero.
IRC – III-2-I



El Objeto de la Fe es la Imagen de Dios: Jesucristo.
Es cierto que la fe pone sus ojos solamente en Dios; pero hay que añadir también que ella nos da a conocer a Aquel a quien el Padre envió, Jesucristo. Porque Dios permanecería muy escondido a nuestras miradas, si Jesucristo no nos iluminase con sus rayos. Con este fin, el Padre depositó cuanto tenía en su Hijo, para manifestarse en Él y, mediante esta comunicación de bienes, representar al vivo la verdadera imagen de su gloria. Porque según hemos dicho que es preciso que seamos atraídos por el Espíritu para sentirnos incitados a buscar a Jesucristo, igualmente hemos de advertir que no hay que buscar al Padre invisible más que en esta su imagen.
IRC- III-2-I


Cristo como mediador es necesario para que los humanos conozcamos a Dios. Y esto no es poner a Cristo aparte de Dios o en conflicto con Dios, sino que Cristo es el medio [el único medio] por el cual podemos creer verdaderamente en Dios.


El verdadero conocimiento de Cristo
Para explicar éste asunto, Calvino escribe:
Por tanto, el verdadero conocimiento de Cristo es que lo recibamos tal como el Padre nos lo ofrece; a saber, revestido de su Evangelio. Porque así como nos es propuesto cual blanco de nuestra fe, así también jamás llegaremos a Él más que guiados por el Evangelio. De hecho, en él se nos abren los tesoros de la gracia, que si permanecieran cerrados, de muy poco nos aprovecharía Cristo.
IRC – III-2-VI


Cristo, quien es el objeto de la FE [la única y verdadera fe], es entendido en términos del evangelio, el cual nos dirige a la gracia de Dios.

IRC = Institución de la Religión Cristiana
Traducido y editado por Pbro. Samuel Hdz. Clemente de “Calvin on Faith Series”
Parte 1- de
Justin Holcomb en www.theresurgence.com

11/3/09

El Divino Salvador


El Divino Salvador

¡Jesús es Dios! Así de sencilla y real como es ésta declaración, no es aceptada por todos como verdad.

Juan 10:22
22Celebrábase en Jerusalén la fiesta de la dedicación. Era invierno, 23y Jesús andaba en el templo por el pórtico de Salomón. 24Y le rodearon los judíos y le dijeron: ¿Hasta cuándo nos turbarás el alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente. 25Jesús les respondió: Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ellas dan testimonio de mí; 26pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho. 27Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, 28y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. 29Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. 30Yo y el Padre uno somos.
31Entonces los judíos volvieron a tomar piedras para apedrearle. 32Jesús les respondió: Muchas buenas obras os he mostrado de mi Padre; ¿por cuál de ellas me apedreáis? 33Le respondieron los judíos, diciendo: Por buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; porque tú, siendo hombre, te haces Dios.


Por declaraciones como éstas: "Yo y el Padre uno somos" Jesús acabó en una cruz; nosotros sabemos que detrás de su muerte estaba la soberana mano del Padre ejecutando sus planes.
También sabemos, que Jesús no estaba mintiendo, sino que sus palabras fueron verdad: Él y el Padre UNO son.


Colosenses 1:15-20
15El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. 16Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. 17Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten; 18y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia; 19por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, 20y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.


Jesús es Dios
¡Adoremos a Jesús!
Colosenses nos proporciona una descripción del Hijo de Dios que nos es de enseñanza y motivación para adorar al Hijo de Dios.


Él es la imagen de Dios

La imagen del Dios INVISIBLE.
Juan 1:18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.

Nadie ha visto jamás a Dios.
Dios es invisible, no tiene cuerpo como nosotros…

Jesús es la Imagen de Dios.
¿No somos nosotros también imágenes de Dios?

Génesis 1:26-27
26Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza… 27Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó


La voluntad de Dios fue que Adán y Eva, imágenes de Dios, le honraran y diesen gloria.
Sin embargo, el pecado empañó, opacó y corrompió la imagen de Dios.

Por eso fue necesario un NUEVO ADÁN (Jesús)
Porque en Adán todos morimos pero en Jesús tenemos vida.

1 Corintios 15:22
Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.

Juan 14:7
7Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.
8Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta. 9Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre? 10¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras.

Jesús es Dios, ver a Jesús es ver a Dios.
Por eso, podemos decir que veremos a Dios.


Él es el primogénito de la creación.
¿Cómo que el primogénito?
Podría éste pasaje decir que Jesús fue el primero en ser creado.
Dios creó (engendró) al Hijo y luego el Hijo creó todas las demás cosas…
Es así como en el pasado un pastor llamado Arrio, en el siglo 4º predicaba que el Hijo fue la primera creación de Dios.

En nuestros días, vemos la misma declaración en los Testigos de Jehová.
Quienes predican que la doctrina de la Trinidad no es bíblica.
También predican que Jesús no es Dios, sino sólo hijo de Dios.
Piensan que Jesús y el arcángel Miguel son la misma persona.

Ahora bien; yo NO odio a los testigos de Jehová.
Debemos orar por ellos así como por todos los demás que viven engañados en sus propias interpretaciones y no aceptan la verdad de la Biblia.

Y en la medida de lo posible, te invito a que abras tu puerta y los dejes entrar si llegan a visitarte; escucha lo que digan, si tienes una manera bíblica de contestarles hazlo; si surgen dudas en ti, anótalas y busca las respuestas en la Biblia, compártelas con tu pastor y hermanos y deja que la verdad transforme tu vida más y más. Me temo que muchos no abrimos la puerta de nuestra casa a los testigos de Jehová porque no somos diligentes en nuestro estudio personal de la Biblia. Pero quizá Dios quiera usarnos como instrumentos de redención para algunos que creen y predican un evangelio sin Cristo.
No cierres tu puerta; sé un embajador de Jesús en nombre de Dios.

Pero NO puedo creer que alguien que no adore a Jesús como Dios pueda ser salvo.
Por más que leamos,
Por más que vallamos al estudio.
No es por obras, sino por la gracia de Jesús.
Jesús es Dios, y quienes no le adoran como Dios, no verán a Dios.

Entonces, ¿Qué entendemos cuando la Biblia declara que el Hijo es el “Primogénito de la creación”?

No creemos que diga que el Hijo fue creado.
Es la razón por la que el Credo de Nicea, elaborado para contrarrestar las ideas de Arrio, dice que Jesús es “Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, Engendrado, NO creado…”

Debemos señalar que además, éste es el único pasaje donde se encuentra la frase “Primogénito de la creación”
Y una regla general de interpretación es que no podemos fundamentar un sistema doctrinal completo en un solo versículo de la Biblia.

En la expresión “primogénito de la creación” debemos entender el asunto desde la perspectiva judía en que fue declarado.
El primogénito de una familia, era quien tenía autoridad sobre todas las cosas, igual que el Padre.
El primogénito era el dueño inmediato aún en vida del padre. Y al morir el padre todo era del primogénito.

En ése sentido se nos dice que Jesús es el Primogénito de la creación.

El Padre le ha concedido toda la autoridad a su Hijo, así que el Hijo no es el primero en haber sido creado (como pretenden los arrianos) sino el Heredero y Dueño de todo lo que pertenece al Padre.

El universo es del Hijo.
Todo lo que existe es del HIJO.

Filipenses 2:9-11
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, 10para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; 11y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.



Él es creador y sustentador.

Génesis 1:1 Comienza diciendo: “En el principio creó DIOS los cielos y la tierra” esto quiere decir que desde antes de todo lo creado, Dios ya existía; nosotros adoramos al Dios eterno que no tiene principio ni fin.

Juan 1:1 Nos dice que “En el Principio era el VERBO y el verbo era con Dios y EL VERBO ERA DIOS”
Nosotros creemos que la Biblia es un mensaje completo de principio a fin y que no se contradice en ninguna de sus partes sino que se complementan todas ellas.
Así que El VERBO (Palabra que Juan usa para referirse al Hijo) estaba con Dios y ERA Dios desde antes de la creación.

El HIJO y El Padre UNO SON.

El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo intervinieron activamente en la creación. Jesús, es el creador de todas las cosas junto con el Padre y su Espíritu.

Y no sólo es creador sino además SUSTENTADOR, todas las cosas por él subsisten. Jesús sostiene lo creado.

Sólo existen 2 categorías de existencia:
Lo creado y el creador…
La pregunta decisiva respecto a Jesús es ¿A qué categoría pertenece? ¿Es Creador o es creación?

Es idolatría adorar a la creación.
Romanos 1:25
Ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén.


Si el Hijo fuera creación; entonces, lo que ocurrirá en el cielo es un acto de idolatría y no de adoración:

Apocalipsis 5:13
13Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos.

¿A quién adoran? A Jesús (el Cordero)
¿Por qué permite el Padre que adoren al Hijo? Porque los dos son UNO.


Hasta aquí nos hemos referido a la 2ª persona de la trinidad como EL HIJO.

Porque si habláramos de Jesús, habría que hacer algunas aclaraciones más.

El Hijo no tiene Principio ni fin; sin embargo, Jesús, entró en la Historia humana en un momento preciso y murió luego de 33 años.

Nosotros decimos que en Jesús existen 2 naturalezas, Jesús es completo Dios y Completo Hombre. Algo difícil de entender pero que debemos creer.

Cuando Jesús llora, duerme, se cansa, tiene hambre y dolor, lo que vemos en la plena manifestación de su humanidad.

Cuando Jesús sana enfermedades, resucita muertos, perdona pecados, multiplica el pan y calma la tempestad, lo que vemos es la plena manifestación de su divinidad.

El HIJO no tiene principio ni fin, pero la ENCARNACIÖN del Hijo, llamado Jesús sí tiene un escenario histórico.

Ahora bien, esa encarnación permanece hasta HOY, el HIJO regresará tal como lo vieron ascender los apóstoles.
Su nombre hasta hoy es Jesús y su cuerpo es el mismo, aunque glorificado.

Está sentado en su trono, gobernando y sujetando todas las cosas bajo su autoridad.



Él es nuestra reconciliación.
Colosenses 1:20
Y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.


El Hijo, se despojó de TODO para reconciliarnos.
Esa palabra nos hace adorarlo más y más.
No sólo es Dios, creador, sustentador, dueño y gobernante… también es siervo.
Se despojó de sí mismo por amor.

El milagro de la cruz es que la sangre derramada fue la sangre del Hijo de Dios.
Jesús es el Cordero que quita los pecados del mundo.


¿Qué hacemos con todo esto?
¡Adoremos a Jesús!


Él nos dio a conocer al Padre.
Él es dueño de todas las cosas.
Él nos creó y nos sustenta hasta hoy.
Él nos ha reconciliado con el Padre.

Una comida ESPECIAL


Una comida especial.

La comida no es siempre para lo mismo.
Aunque toda la comida entra en la boca y llega a la barriga; no toda la comida tiene el mismo propósito.

¿Porqué alguien con tos tendría que comer miel con limón? ¿Sólo para comerlo? No, sino que además ayuda a su garganta.
¿Por qué una persona recién operada debería comer hígado de res? ¿Sólo por comer? No, sino que ésta comida ayuda a su cicatrización.
Así que la comida no es sólo para llenar el estómago, sino que hay otros propósitos.
Cicatrizar, desinflamar, adelgazar, nutrir… santificar…

¿Santificar? ¡Claro! Hay comida que sirve para santificarnos.
Si queremos fortalecer la vista; hay que comer zanahorias.
Si queremos fortalecer los huesos hay que tomar leche.
Pero Si quieres fortalecer el alma; hay que comer pan y vino.
Pero no sólo pan y vino, sino pan y vino en nombre de Jesús.
A esto le llamamos la Santa Cena.


¿Qué ocurre cuando celebramos la Santa Cena?

Recordamos el pasado.

Nuestro Pasado.
Al venir al templo y presentarnos ante Dios, es necesario hacer un ejercicio retrospectivo.
Y echar una mirada a nuestro pasado;

¿Hay cosas de las cuales te enorgulleces? ¿Tu mejor obra?
Quizá podrías hacer una lista larga de ellas.
Quizá tu lista es corta…
Sin embargo, nuestra lista de buenas obras, sea corta o larga no ayudará de mucho pues a la par de las buenas obras, se extiende otra lista de pensamientos, palabras, acciones, intenciones y actitudes que no agradan a Dios.

¿Hay cosas de las que te arrepientes?
¿Hay cosas que prefieres no recordar?
¿Aquel día, aquella noche, aquella tarde; esos pensamientos, esas palabras, esas intenciones?
Es necesario recordarlas todas y arrepentirnos.

Jesús en nuestro pasado
La lista de nuestro pasado oscuro debe venir a nuestra mente; porque es un problema que no podemos esconder.
Y es necesario recordar un nombre: Jesús
Hace más de 2000 años; cargó con nuestro pecado en su cruz y nos reconcilió con el Padre.

Fue capaz de lavar los pies de sus discípulos y poner la otra mejilla. Fue capaz de dejar el cielo, humillarse y sacrificarse por su iglesia.

Isaías 53:4-7
4Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. 5Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. 6Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros. 7Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.


Delante de nosotros, en la mesa vemos jugo de uva y pan. Pero nuestra mente debe trasladarse a la noche en que Jesús, sentado a la mesa con sus discípulos:

“La misma noche que el Señor Jesús fue traicionado, tomó en sus manos pan y, después de dar gracias a Dios, lo partió y dijo: “Esto es mi cuerpo, que muere en favor de ustedes. Hagan esto en memoria de mí.” Así también, después de la cena, tomó en sus manos la copa y dijo: “Esta copa es la nueva alianza confirmada con mi sangre. Cada vez que beban, háganlo en memoria de mí.” De manera que, hasta que venga el Señor, ustedes proclaman su muerte cada vez que comen de este pan y beben de esta copa.”
1 Corintios 11:23-26 [DHH]


Así que recordamos nuestro pasado, lleno de pecado y la obra de Jesús en nuestro pasado; perdonándonos y reconciliándonos con el Padre.

Anhelamos el futuro
¿Cuál es tu sueño más hermoso?
Si te pido que visualices el futuro que más anhelas, ¿Cómo se vería?

¿Tener el negocio de tus sueños?
¿Tener tu título de Dr. O Lic.?
¿Tener a tu bebé en tus manos o a tus nietos?

No quiero ser aguafiestas, pero suponiendo que el futuro que anhelas se haga realidad; no esperes que dure para siempre.

Las cosas que vemos son temporales; pero hay algo que no es temporal.
Hay un lugar donde no hacen falta los calendarios.
Un lugar donde no hay que tomar medicinas ni ir al doctor.
Un lugar donde los cumpleaños no se celebran porque nunca envejecemos.
Un lugar donde no hay cárceles ni narcotraficantes.
Un lugar donde las familias no se pelean ni se desbaratan porque todos son de la mima familia.
Un lugar sin violencia ni discriminación
Un lugar donde no hay diferencias de clases sociales ni de razas.
Nosotros lo llamamos cielo.

Juan 14:1-3
1No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. 2En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 3Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.


Hasta hoy, cuando los judíos se reúnen en diversas partes del mundo para celebrar la pascua, es tradicional que digan: “Y que la próxima sea en Jerusalén”. Ésta expresión está basada en su expectativa mesiánica, creyendo que el Mesías que vendrá llevará a todos los judíos dispersos a Jerusalén para reinar desde ahí.
Nosotros los cristianos creemos que el Mesías es Jesús, que YA vino y YA reina y algún día veremos la Nueva Jerusalén descender del cielo.
Así que al participar de la Santa Cena, podemos anhelar: “Que la próxima sea en la gloria”


26Mientras comían, Jesús tomó en sus manos el pan y, habiendo dado gracias a Dios, lo partió y se lo dio a los discípulos, diciendo:
—Tomen y coman, esto es mi cuerpo.
27Luego tomó en sus manos una copa y, habiendo dado gracias a Dios, se la pasó a ellos, diciendo:
—Beban todos ustedes de esta copa, 28porque esto es mi sangre, con la que se confirma la alianza, sangre que es derramada en favor de muchos para perdón de sus pecados. 29Pero les digo que no volveré a beber de este producto de la vid, hasta el día en que beba con ustedes el vino nuevo en el reino de mi Padre.
Mateo 26:26 [DHH]


Al Participar de la Santa Cena, miramos hacia el pasado, a Jesús como un cordero sufriente pero también miramos hacia el futuro a Jesús como un león victorioso.

Somos nutridos HOY

Mientras llega la segunda venida de Jesús, nosotros somos transformados.
Cada día estamos llamados a perseverar en Jesús.
Leer su palabra
Parecernos más a él
Confiar más en él.
Amar más al prójimo y desechar el pecado.

Romanos 13:11-14
11Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. 12La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz. 13Andemos como de día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia, 14sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.


Así como miramos hacia el pasado en la Cruz de Jesús y hacia el futuro en su segunda venida; tenemos que recordar que vivimos HOY.

Y hasta hoy seguimos batallando con diversas pruebas, aflicciones, tentaciones, privaciones y dificultades.

12Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, 13sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría.
1 Pedro 4:12-13


Y participar de la Santa Cena en arrepentimiento y fe nos fortalece como Iglesia por medio del Espíritu Santo.

De una manera espiritual somos nutridos y nuestra alma se fortalece. Así que podemos obedecer con determinación la voluntad de Dios, podemos soportar la tentación con dominio propio, podemos confiar en medio de la dificultad, podemos gozarnos a pesar de las diversas pruebas e incluso cantar con alegría en nuestro corazón, santificarnos día a día y compartir el mensaje de consuelo y perdón de Jesús.
Porque nuestro pasado ha sido redimido en Cristo, nuestro futuro está asegurado por sus promesas y nuestro presente está en sus manos.

2Pues por Cristo hemos podido acercarnos a Dios por medio de la fe, para gozar de su favor, y estamos firmes, y nos gloriamos con la esperanza de tener parte en la gloria de Dios. 3Y no solo esto, sino que también nos gloriamos de los sufrimientos; porque sabemos que el sufrimiento nos da firmeza para soportar, 4y esta firmeza nos permite salir aprobados, y el salir aprobados nos llena de esperanza.
Romanos 5:2-4 [DHH]


Así que participemos de la Santa Cena adorando a Jesucristo.
Demos gracias por lo que hizo en el pasado.
Alegrémonos por lo que hará en el futuro
Y permanezcamos firmes porque él está actuando en el presente.