11/3/09

El Divino Salvador


El Divino Salvador

¡Jesús es Dios! Así de sencilla y real como es ésta declaración, no es aceptada por todos como verdad.

Juan 10:22
22Celebrábase en Jerusalén la fiesta de la dedicación. Era invierno, 23y Jesús andaba en el templo por el pórtico de Salomón. 24Y le rodearon los judíos y le dijeron: ¿Hasta cuándo nos turbarás el alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente. 25Jesús les respondió: Os lo he dicho, y no creéis; las obras que yo hago en nombre de mi Padre, ellas dan testimonio de mí; 26pero vosotros no creéis, porque no sois de mis ovejas, como os he dicho. 27Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, 28y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. 29Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre. 30Yo y el Padre uno somos.
31Entonces los judíos volvieron a tomar piedras para apedrearle. 32Jesús les respondió: Muchas buenas obras os he mostrado de mi Padre; ¿por cuál de ellas me apedreáis? 33Le respondieron los judíos, diciendo: Por buena obra no te apedreamos, sino por la blasfemia; porque tú, siendo hombre, te haces Dios.


Por declaraciones como éstas: "Yo y el Padre uno somos" Jesús acabó en una cruz; nosotros sabemos que detrás de su muerte estaba la soberana mano del Padre ejecutando sus planes.
También sabemos, que Jesús no estaba mintiendo, sino que sus palabras fueron verdad: Él y el Padre UNO son.


Colosenses 1:15-20
15El es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. 16Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. 17Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten; 18y él es la cabeza del cuerpo que es la iglesia, él que es el principio, el primogénito de entre los muertos, para que en todo tenga la preeminencia; 19por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, 20y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.


Jesús es Dios
¡Adoremos a Jesús!
Colosenses nos proporciona una descripción del Hijo de Dios que nos es de enseñanza y motivación para adorar al Hijo de Dios.


Él es la imagen de Dios

La imagen del Dios INVISIBLE.
Juan 1:18 A Dios nadie le vio jamás; el unigénito Hijo, que está en el seno del Padre, él le ha dado a conocer.

Nadie ha visto jamás a Dios.
Dios es invisible, no tiene cuerpo como nosotros…

Jesús es la Imagen de Dios.
¿No somos nosotros también imágenes de Dios?

Génesis 1:26-27
26Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza… 27Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó


La voluntad de Dios fue que Adán y Eva, imágenes de Dios, le honraran y diesen gloria.
Sin embargo, el pecado empañó, opacó y corrompió la imagen de Dios.

Por eso fue necesario un NUEVO ADÁN (Jesús)
Porque en Adán todos morimos pero en Jesús tenemos vida.

1 Corintios 15:22
Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados.

Juan 14:7
7Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; y desde ahora le conocéis, y le habéis visto.
8Felipe le dijo: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta. 9Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre? 10¿No crees que yo soy en el Padre, y el Padre en mí? Las palabras que yo os hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre que mora en mí, él hace las obras.

Jesús es Dios, ver a Jesús es ver a Dios.
Por eso, podemos decir que veremos a Dios.


Él es el primogénito de la creación.
¿Cómo que el primogénito?
Podría éste pasaje decir que Jesús fue el primero en ser creado.
Dios creó (engendró) al Hijo y luego el Hijo creó todas las demás cosas…
Es así como en el pasado un pastor llamado Arrio, en el siglo 4º predicaba que el Hijo fue la primera creación de Dios.

En nuestros días, vemos la misma declaración en los Testigos de Jehová.
Quienes predican que la doctrina de la Trinidad no es bíblica.
También predican que Jesús no es Dios, sino sólo hijo de Dios.
Piensan que Jesús y el arcángel Miguel son la misma persona.

Ahora bien; yo NO odio a los testigos de Jehová.
Debemos orar por ellos así como por todos los demás que viven engañados en sus propias interpretaciones y no aceptan la verdad de la Biblia.

Y en la medida de lo posible, te invito a que abras tu puerta y los dejes entrar si llegan a visitarte; escucha lo que digan, si tienes una manera bíblica de contestarles hazlo; si surgen dudas en ti, anótalas y busca las respuestas en la Biblia, compártelas con tu pastor y hermanos y deja que la verdad transforme tu vida más y más. Me temo que muchos no abrimos la puerta de nuestra casa a los testigos de Jehová porque no somos diligentes en nuestro estudio personal de la Biblia. Pero quizá Dios quiera usarnos como instrumentos de redención para algunos que creen y predican un evangelio sin Cristo.
No cierres tu puerta; sé un embajador de Jesús en nombre de Dios.

Pero NO puedo creer que alguien que no adore a Jesús como Dios pueda ser salvo.
Por más que leamos,
Por más que vallamos al estudio.
No es por obras, sino por la gracia de Jesús.
Jesús es Dios, y quienes no le adoran como Dios, no verán a Dios.

Entonces, ¿Qué entendemos cuando la Biblia declara que el Hijo es el “Primogénito de la creación”?

No creemos que diga que el Hijo fue creado.
Es la razón por la que el Credo de Nicea, elaborado para contrarrestar las ideas de Arrio, dice que Jesús es “Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, Engendrado, NO creado…”

Debemos señalar que además, éste es el único pasaje donde se encuentra la frase “Primogénito de la creación”
Y una regla general de interpretación es que no podemos fundamentar un sistema doctrinal completo en un solo versículo de la Biblia.

En la expresión “primogénito de la creación” debemos entender el asunto desde la perspectiva judía en que fue declarado.
El primogénito de una familia, era quien tenía autoridad sobre todas las cosas, igual que el Padre.
El primogénito era el dueño inmediato aún en vida del padre. Y al morir el padre todo era del primogénito.

En ése sentido se nos dice que Jesús es el Primogénito de la creación.

El Padre le ha concedido toda la autoridad a su Hijo, así que el Hijo no es el primero en haber sido creado (como pretenden los arrianos) sino el Heredero y Dueño de todo lo que pertenece al Padre.

El universo es del Hijo.
Todo lo que existe es del HIJO.

Filipenses 2:9-11
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, 10para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; 11y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.



Él es creador y sustentador.

Génesis 1:1 Comienza diciendo: “En el principio creó DIOS los cielos y la tierra” esto quiere decir que desde antes de todo lo creado, Dios ya existía; nosotros adoramos al Dios eterno que no tiene principio ni fin.

Juan 1:1 Nos dice que “En el Principio era el VERBO y el verbo era con Dios y EL VERBO ERA DIOS”
Nosotros creemos que la Biblia es un mensaje completo de principio a fin y que no se contradice en ninguna de sus partes sino que se complementan todas ellas.
Así que El VERBO (Palabra que Juan usa para referirse al Hijo) estaba con Dios y ERA Dios desde antes de la creación.

El HIJO y El Padre UNO SON.

El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo intervinieron activamente en la creación. Jesús, es el creador de todas las cosas junto con el Padre y su Espíritu.

Y no sólo es creador sino además SUSTENTADOR, todas las cosas por él subsisten. Jesús sostiene lo creado.

Sólo existen 2 categorías de existencia:
Lo creado y el creador…
La pregunta decisiva respecto a Jesús es ¿A qué categoría pertenece? ¿Es Creador o es creación?

Es idolatría adorar a la creación.
Romanos 1:25
Ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén.


Si el Hijo fuera creación; entonces, lo que ocurrirá en el cielo es un acto de idolatría y no de adoración:

Apocalipsis 5:13
13Y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: Al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos.

¿A quién adoran? A Jesús (el Cordero)
¿Por qué permite el Padre que adoren al Hijo? Porque los dos son UNO.


Hasta aquí nos hemos referido a la 2ª persona de la trinidad como EL HIJO.

Porque si habláramos de Jesús, habría que hacer algunas aclaraciones más.

El Hijo no tiene Principio ni fin; sin embargo, Jesús, entró en la Historia humana en un momento preciso y murió luego de 33 años.

Nosotros decimos que en Jesús existen 2 naturalezas, Jesús es completo Dios y Completo Hombre. Algo difícil de entender pero que debemos creer.

Cuando Jesús llora, duerme, se cansa, tiene hambre y dolor, lo que vemos en la plena manifestación de su humanidad.

Cuando Jesús sana enfermedades, resucita muertos, perdona pecados, multiplica el pan y calma la tempestad, lo que vemos es la plena manifestación de su divinidad.

El HIJO no tiene principio ni fin, pero la ENCARNACIÖN del Hijo, llamado Jesús sí tiene un escenario histórico.

Ahora bien, esa encarnación permanece hasta HOY, el HIJO regresará tal como lo vieron ascender los apóstoles.
Su nombre hasta hoy es Jesús y su cuerpo es el mismo, aunque glorificado.

Está sentado en su trono, gobernando y sujetando todas las cosas bajo su autoridad.



Él es nuestra reconciliación.
Colosenses 1:20
Y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.


El Hijo, se despojó de TODO para reconciliarnos.
Esa palabra nos hace adorarlo más y más.
No sólo es Dios, creador, sustentador, dueño y gobernante… también es siervo.
Se despojó de sí mismo por amor.

El milagro de la cruz es que la sangre derramada fue la sangre del Hijo de Dios.
Jesús es el Cordero que quita los pecados del mundo.


¿Qué hacemos con todo esto?
¡Adoremos a Jesús!


Él nos dio a conocer al Padre.
Él es dueño de todas las cosas.
Él nos creó y nos sustenta hasta hoy.
Él nos ha reconciliado con el Padre.

Una comida ESPECIAL


Una comida especial.

La comida no es siempre para lo mismo.
Aunque toda la comida entra en la boca y llega a la barriga; no toda la comida tiene el mismo propósito.

¿Porqué alguien con tos tendría que comer miel con limón? ¿Sólo para comerlo? No, sino que además ayuda a su garganta.
¿Por qué una persona recién operada debería comer hígado de res? ¿Sólo por comer? No, sino que ésta comida ayuda a su cicatrización.
Así que la comida no es sólo para llenar el estómago, sino que hay otros propósitos.
Cicatrizar, desinflamar, adelgazar, nutrir… santificar…

¿Santificar? ¡Claro! Hay comida que sirve para santificarnos.
Si queremos fortalecer la vista; hay que comer zanahorias.
Si queremos fortalecer los huesos hay que tomar leche.
Pero Si quieres fortalecer el alma; hay que comer pan y vino.
Pero no sólo pan y vino, sino pan y vino en nombre de Jesús.
A esto le llamamos la Santa Cena.


¿Qué ocurre cuando celebramos la Santa Cena?

Recordamos el pasado.

Nuestro Pasado.
Al venir al templo y presentarnos ante Dios, es necesario hacer un ejercicio retrospectivo.
Y echar una mirada a nuestro pasado;

¿Hay cosas de las cuales te enorgulleces? ¿Tu mejor obra?
Quizá podrías hacer una lista larga de ellas.
Quizá tu lista es corta…
Sin embargo, nuestra lista de buenas obras, sea corta o larga no ayudará de mucho pues a la par de las buenas obras, se extiende otra lista de pensamientos, palabras, acciones, intenciones y actitudes que no agradan a Dios.

¿Hay cosas de las que te arrepientes?
¿Hay cosas que prefieres no recordar?
¿Aquel día, aquella noche, aquella tarde; esos pensamientos, esas palabras, esas intenciones?
Es necesario recordarlas todas y arrepentirnos.

Jesús en nuestro pasado
La lista de nuestro pasado oscuro debe venir a nuestra mente; porque es un problema que no podemos esconder.
Y es necesario recordar un nombre: Jesús
Hace más de 2000 años; cargó con nuestro pecado en su cruz y nos reconcilió con el Padre.

Fue capaz de lavar los pies de sus discípulos y poner la otra mejilla. Fue capaz de dejar el cielo, humillarse y sacrificarse por su iglesia.

Isaías 53:4-7
4Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. 5Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. 6Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros. 7Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca.


Delante de nosotros, en la mesa vemos jugo de uva y pan. Pero nuestra mente debe trasladarse a la noche en que Jesús, sentado a la mesa con sus discípulos:

“La misma noche que el Señor Jesús fue traicionado, tomó en sus manos pan y, después de dar gracias a Dios, lo partió y dijo: “Esto es mi cuerpo, que muere en favor de ustedes. Hagan esto en memoria de mí.” Así también, después de la cena, tomó en sus manos la copa y dijo: “Esta copa es la nueva alianza confirmada con mi sangre. Cada vez que beban, háganlo en memoria de mí.” De manera que, hasta que venga el Señor, ustedes proclaman su muerte cada vez que comen de este pan y beben de esta copa.”
1 Corintios 11:23-26 [DHH]


Así que recordamos nuestro pasado, lleno de pecado y la obra de Jesús en nuestro pasado; perdonándonos y reconciliándonos con el Padre.

Anhelamos el futuro
¿Cuál es tu sueño más hermoso?
Si te pido que visualices el futuro que más anhelas, ¿Cómo se vería?

¿Tener el negocio de tus sueños?
¿Tener tu título de Dr. O Lic.?
¿Tener a tu bebé en tus manos o a tus nietos?

No quiero ser aguafiestas, pero suponiendo que el futuro que anhelas se haga realidad; no esperes que dure para siempre.

Las cosas que vemos son temporales; pero hay algo que no es temporal.
Hay un lugar donde no hacen falta los calendarios.
Un lugar donde no hay que tomar medicinas ni ir al doctor.
Un lugar donde los cumpleaños no se celebran porque nunca envejecemos.
Un lugar donde no hay cárceles ni narcotraficantes.
Un lugar donde las familias no se pelean ni se desbaratan porque todos son de la mima familia.
Un lugar sin violencia ni discriminación
Un lugar donde no hay diferencias de clases sociales ni de razas.
Nosotros lo llamamos cielo.

Juan 14:1-3
1No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí. 2En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros. 3Y si me fuere y os preparare lugar, vendré otra vez, y os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis.


Hasta hoy, cuando los judíos se reúnen en diversas partes del mundo para celebrar la pascua, es tradicional que digan: “Y que la próxima sea en Jerusalén”. Ésta expresión está basada en su expectativa mesiánica, creyendo que el Mesías que vendrá llevará a todos los judíos dispersos a Jerusalén para reinar desde ahí.
Nosotros los cristianos creemos que el Mesías es Jesús, que YA vino y YA reina y algún día veremos la Nueva Jerusalén descender del cielo.
Así que al participar de la Santa Cena, podemos anhelar: “Que la próxima sea en la gloria”


26Mientras comían, Jesús tomó en sus manos el pan y, habiendo dado gracias a Dios, lo partió y se lo dio a los discípulos, diciendo:
—Tomen y coman, esto es mi cuerpo.
27Luego tomó en sus manos una copa y, habiendo dado gracias a Dios, se la pasó a ellos, diciendo:
—Beban todos ustedes de esta copa, 28porque esto es mi sangre, con la que se confirma la alianza, sangre que es derramada en favor de muchos para perdón de sus pecados. 29Pero les digo que no volveré a beber de este producto de la vid, hasta el día en que beba con ustedes el vino nuevo en el reino de mi Padre.
Mateo 26:26 [DHH]


Al Participar de la Santa Cena, miramos hacia el pasado, a Jesús como un cordero sufriente pero también miramos hacia el futuro a Jesús como un león victorioso.

Somos nutridos HOY

Mientras llega la segunda venida de Jesús, nosotros somos transformados.
Cada día estamos llamados a perseverar en Jesús.
Leer su palabra
Parecernos más a él
Confiar más en él.
Amar más al prójimo y desechar el pecado.

Romanos 13:11-14
11Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. 12La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz. 13Andemos como de día, honestamente; no en glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia, 14sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.


Así como miramos hacia el pasado en la Cruz de Jesús y hacia el futuro en su segunda venida; tenemos que recordar que vivimos HOY.

Y hasta hoy seguimos batallando con diversas pruebas, aflicciones, tentaciones, privaciones y dificultades.

12Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, 13sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría.
1 Pedro 4:12-13


Y participar de la Santa Cena en arrepentimiento y fe nos fortalece como Iglesia por medio del Espíritu Santo.

De una manera espiritual somos nutridos y nuestra alma se fortalece. Así que podemos obedecer con determinación la voluntad de Dios, podemos soportar la tentación con dominio propio, podemos confiar en medio de la dificultad, podemos gozarnos a pesar de las diversas pruebas e incluso cantar con alegría en nuestro corazón, santificarnos día a día y compartir el mensaje de consuelo y perdón de Jesús.
Porque nuestro pasado ha sido redimido en Cristo, nuestro futuro está asegurado por sus promesas y nuestro presente está en sus manos.

2Pues por Cristo hemos podido acercarnos a Dios por medio de la fe, para gozar de su favor, y estamos firmes, y nos gloriamos con la esperanza de tener parte en la gloria de Dios. 3Y no solo esto, sino que también nos gloriamos de los sufrimientos; porque sabemos que el sufrimiento nos da firmeza para soportar, 4y esta firmeza nos permite salir aprobados, y el salir aprobados nos llena de esperanza.
Romanos 5:2-4 [DHH]


Así que participemos de la Santa Cena adorando a Jesucristo.
Demos gracias por lo que hizo en el pasado.
Alegrémonos por lo que hará en el futuro
Y permanezcamos firmes porque él está actuando en el presente.

5/3/09

Una Iglesia que vive su doctrina


Una Iglesia que vive su doctrina

Por Doctrina, queremos referirnos a nuestras enseñanzas.

Muchas palabras definen la Doctrina de nuestra Iglesia; y muchas denominaciones se declaran a favor de diversas doctrinas.

Pero el llamado no es sólo a declarar y defender una doctrina específica sino a vivir en concordancia a lo que decimos creer.

Al que mucho se le ha dado, mucho se le pedirá. Si como Iglesia proclamamos tener una doctrina sólida y veraz, debemos moldear nuestro ministerio, testimonio y vida en base a tales doctrinas (siempre que sea para loa gloria de Dios).


1) Seamos una Iglesia CRISTIANA.

Hechos 4:12

Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.

El centro de nuestra enseñanza, predicación, culto y servicio es Cristo, el hijo de Dios. Otra manera de decirlo es que somos una Iglesia Cristocéntrica.


2) Seamos una Iglesia BÍBLICA

Deuteronomio 29:29

Las cosas secretas pertenecen a Jehová nuestro Dios; mas las reveladas son para nosotros y para nuestros hijos para siempre, para que cumplamos todas las palabras de esta ley.


La base de nuestra enseñanza, predicación, culto y estilo de vida es la Biblia (al menos eso anhelamos). No las palabras de tal o cual predicador, no un libro alterno a la Biblia, sino sólo la Biblia. (Aunque otros libros y maestros proveen de mucha ayuda, éstos son subordinados a la Biblia). Nuestro apego a la biblia, nos lleva hasta los originales en Griego y Hebreo, que son la autoridad última y fuera de ella no hay revelación nueva o extraviada.


3) Seamos una Iglesia TRINITARIA.

1 Juan 5:7

Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, el Verbo y el Espíritu Santo; y estos tres son uno.


Adoramos al Dios Trino revelado en la Biblia, “Un Dios en Tres Personas, Padre, Hijo y Espíritu Santo; mismos en sustancia, iguales en poder y gloria”


4) Seamos una Iglesia EVANGÉLICA

Gálatas 1:6-8

Estoy maravillado de que tan pronto os hayáis alejado del que os llamó por la gracia de Cristo, para seguir un evangelio diferente. No que haya otro, sino que hay algunos que os perturban y quieren pervertir el evangelio de Cristo. Mas si aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea anatema.


El centro de nuestra enseñanza, predicación, culto y servicio es el Evangelio de Jesús, que muestra nuestro gran problema (el pecado) y la única solución provista por Dios (arrepentirse y creer en Jesús)


5) Seamos una Iglesia REFORMADA

2 Corintios 13:5

Examinaos a vosotros mismos si estáis en la fe; probaos a vosotros mismos. ¿O no os conocéis a vosotros mismos, que Jesucristo está en vosotros, a menos que estéis reprobados?


Nuestra teología se remonta al siglo 16, en que hermanos defensores de la correcta interpretación y enseñanza de la Biblia, levantaron la voz en contra de la institución romana. Son 5 los principios reformados de la Iglesia:



a) Sólo la Biblia

b) Sólo Jesús

c) Sólo a Dios la Gloria

d) Sólo por gracia

e) Sólo en fe


6) Seamos una Iglesia Confesional

1 Pedro 3:15

Santificad a Dios el Señor en vuestros corazones, y estad siempre preparados para presentar defensa con mansedumbre y reverencia ante todo el que os demande razón de la esperanza que hay en vosotros.


Esto quiere decir que hacemos declaraciones oficiales de lo que creemos y tratamos de apegarnos a ellas; no que sean inerrantes, sino que las emitimos en base a la Biblia. Lo hacemos para definir nuestras creencias y distinguirlas de entre otras ideologías.


Nuestras Principales Confesiones son:


El Credo de los Apóstoles y El Credo Niceno.

La Confesión de Fe de Westminster (Y Catecismos)


7) Seamos una Iglesia Comunitaria

Efesios 2:19

Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios.


Es decir, que aunque el ministerio se enfoca de manera particular a diferentes personas (niños, mujeres, varones, adolescentes, etc.) nos vemos como una sola comunidad de creyentes en Cristo.


8) Seamos una Iglesia Peregrina

1 Pedro 2:11-12

Amados, yo os ruego como a extranjeros y peregrinos, que os abstengáis de los deseos carnales que batallan contra el alma, manteniendo buena vuestra manera de vivir…


Nos consideramos una congregación de extranjeros que vamos de paso. Éste mundo no es nuestro destino final, nosotros somos ciudadanos del cielo y peregrinos en éste mundo. Eso no quiere decir que seamos ermitaños, sino que mientras peregrinamos aquí, invitamos a otros a unirse a la compañía, huyendo de la condenación en dirección a Jesús.


9) Seamos una Iglesia Militante

2 Pedro 1:5-8

Vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.


No somos espectadores sino Participantes de la Iglesia, no queremos ser sólo oidores sino también hacedores de la Palabra. Militamos en las filas de Jesús, no es momento de sentarnos a esperar el regreso de Jesús, vivimos para él, anhelamos hacerlo todo para su gloria.


10) Seamos una Iglesia Santa

Efesios 5:25-27

…Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra, a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.


Somos santos, eso no quiere decir perfectos o sin pecado, sino rescatados del pecado para vivir en conocimiento, obediencia e imitación de Jesús. Santo quiere decir “apartado”, nosotros nos consideramos así, apartados del pecado para reflejar la gloria de Jesús. No somos productos terminados, sino proyectos en manos de Jesús, él nos moldea día a día, y anhelamos que nuestros frutos den muestra del cambio obrado por Jesús.